LA CONDICIÓN FÍSICA Y LA SALUD

  
LA CONDICIÓN FÍSICA Y LA SALUD





                                                    Magín Álvarez Romero, 1º ESO A



1.        DESCRIPCIÓN
Este trabajo trata sobre la importancia que tiene para las personas la condición física en su salud, describiendo los beneficios del ejercicio físico, dando unas pautas sobre los posibles entrenamientos a seguir, hábitos a evitar y primeros auxilios.
La condición física de una persona se puede definir como el conjunto de la fuerza, coordinación, velocidad, resistencia, flexibilidad y velocidad de cada uno, las cuales pueden ser mejoradas mediante el entrenamiento.
Según la Organización Mundial de la Salud, la salud es el estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de infecciones o enfermedades ligeras, fuertes o graves.
El ejercicio físico es cualquier movimiento corporal repetido y destinado a conservar la salud o recobrarla. A menudo, también está dirigido hacia la mejora de la capacidad atlética y/o la habilidad.
2.        OBJETIVOS
El ejercicio físico proporciona a las personas una buena condición física, que es imprescindible para tener una buena salud. Otros hábitos que deben combinarse con la realización de ejercicios son: la buena alimentación, el descanso adecuado, la higiene y evitar el consumo de sustancias perjudiciales para el organismo, como el tabaco o el alcohol, entre otros.
Sus beneficios pueden resumirse en los siguientes puntos:
·               Aumenta la vitalidad, por lo que proporciona más energía y capacidad de trabajo.
·               Combate el estrés, la ansiedad y la depresión.
·               Incrementa la autoestima y auto imagen.
·               Mejora el tono muscular y la resistencia a la fatiga.
·               Quema calorías, ayudando a perder el peso excesivo o a mantenerse en el peso ideal.
·               Ayuda a conciliar el sueño.
·               Fomenta la convivencia entre amigos y familiares, además de dar la oportunidad de conocer gente.
·               Favorece estilos de vida sin tabaco, alcohol y drogas.
·               Atenúa la sensación de aislamiento y soledad entre ancianos.
·               Fortalece los pulmones y con ello mejora la circulación de oxígeno en la sangre.
·               Disminuye el colesterol y el riesgo de infarto, y regulariza la tensión arterial.
·               Permite una distracción momentánea de las preocupaciones, con lo que se obtiene tranquilidad y mayor claridad para enfrentarlas más adelante.
La cantidad mínima para prevenir enfermedades es de 30 minutos diarios de actividad física moderada.
3.        PARTES O FASES
Independientemente del ejercicio físico que vayamos a practicar, todos los ejercicios siguen una secuencia en la que: preparamos el cuerpo para el ejercicio, desarrollamos el ejercicio y volvemos al estado de reposo inicial.
Las partes de un entrenamiento completo son:
·               Calentamiento - preparamos nuestro cuerpo para el esfuerzo y para ello realizaremos ejercicios aeróbicos a baja frecuencia en combinación con ejercicios de flexibilidad.
·               Desarrollo del ejercicio - esta es la parte en la que desarrollamos el ejercicio programado (ejercicios de fuerza, bici, natación, etc.).
·               Vuelta a la calma - en esta tercera fase buscamos que nuestro cuerpo retorne a la situación previa al ejercicio, con abundantes ejercicios de flexibilidad y con una disminución progresiva del ritmo cardiaco.
4.        ACTIVIDADES O SESIONES
Dependiendo de la edad, condición física y objetivos, se deben programar distintos ejercicios. Como norma general a mayor edad debemos realizar ejercicios menos intensos y más ejercicios de flexibilidad.
Una buena combinación de todos ellos nos proporcionará una buena condición física. El ejercicio para competición deberá estar supervisado por personal experto y médico.
Existen los siguientes tipos de ejercicio físico:
·               Ejercicios de flexibilidad - dirigidos a mejorar la condición general de músculos y articulaciones aumentando su capacidad de movimiento y resistencia a la lesión.
·               Ejercicios anaeróbicos - que aumentan la fuerza muscular.
·               Ejercicios aeróbicos - que aumentan la resistencia a la fatiga.
·               Deportes en equipo - que generalmente combinan los anteriores y favorecen la socialización.
Veamos ahora cómo podemos programar un entrenamiento completo.
·               Calentamiento: comenzamos con ejercicios de flexibilidad estirando todos los grupos musculares y articulaciones, no sólo los que vayamos a trabajar con mayor intensidad. Estos estiramientos serán progresivos en intensidad y con pocas repeticiones. Finalizaremos con un ejercicio que aumente progresivamente nuestro ritmo cardiaco.
·               Desarrollo del ejercicio:
Ø  Ejercicios de flexibilidad y coordinación, ejercicio de grupos musculares y articulaciones por medio de ejercicios de coordinación y equilibrio. El control de la respiración y de la mente ayuda en a lograr los objetivos. Son ejercicios indicados para todo tipo de personas especialmente las de mayor edad. Destacan el Tai-Chi, el yoga y cierta gimnasia deportiva.
Ø  Ejercicios anaeróbicos, exigen de un gran calentamiento y trabajan la fuerza muscular y su capacidad de reacción. Destacan los ejercicios con pesas, la velocidad, la carrera en cuesta, etc.
Ø  Ejercicios aeróbicos, son los más recomendados como base del ejercicio y se adaptan a cualquier edad y condición física. Son aquellas actividades en las que el ritmo de trabajo no llega al límite pero se prolongan en el tiempo. Correr, caminar, ciclismo, spinning y natación son los más populares, no necesitan de equipos caros y se pueden practicar todo el año.
Ø  La práctica de deportes en equipo es divertida y nos ayuda a mantener una buena condición física. Fútbol, tenis, padel, baloncesto, golf, mountainbike, etc., son deportes muy recomendables a ciertas edades, además ayudan a socializar y fomentar valores como el compañerismo, el respeto a la naturaleza y el trabajo en equipo. ¡Debemos practicarlos siempre que podamos!
·               Vuelta a la calma: la recuperación cardiaca y muscular debe de ser progresiva y activa, evitando así las molestas agujetas, manteniendo un trote suave si hemos ejercitado la carrera, o unas brazadas suaves si hemos nadado. Finalizaremos el ejercicio con estiramientos suaves y prolongados y, por supuesto, con una buena ducha.
5.        PRIMEROS AUXILIOS
En caso de sufrir una lesión durante el ejercicio lo primero que hay que hacer es suspender la sesión. Seguir el entrenamiento sólo agravaría la lesión.
Si disponemos de personal sanitario o responsable cerca, se lo comunicaremos para tratarla lo antes posible. En otro caso seguiremos la guía siguiente poniéndonos en manos de personal sanitario lo antes posible y sin tomar medicinas por nuestra cuenta.
En líneas generales las lesiones más frecuentes y su tratamiento inmediato son:
·               Se “sube la bola”: estiramiento del músculo, hidratación y reposo.
·               Roturas fibrilares: exigen de reposo y tratamientos con calor (es el típico pinchazo).
·               Esguince de una articulación: frío inmediato sobre la zona lesionada e inmovilización.
·               Rotura de un hueso: inmovilizar el hueso fracturado.
·               Heridas sangrantes: limpiar con agua y jabón y desinfectar con agua oxigenada o betadine.
·               Traumatismos: los más peligrosos son en la cabeza (de ahí la importancia de usar casco), por eso deberán ser vistos por el especialista. En cualquier caso aplicaremos frío.
6.        OPINIÓN PERSONAL
La práctica de ejercicio es muy beneficiosa para nuestra salud. Cada edad tiene un tipo de ejercicio que se desarrollará de acuerdo con la condición física de cada persona.
La práctica deportiva junto a una buena alimentación y unos hábitos de vida sanos nos ayudarán a tener una mejor calidad de vida y disfrutar más de ella. Además, los deportes en equipo y al aire libre fomentan valores y son muy divertidos.
En caso de lesionarnos debemos acudir al médico que nos ayudará en nuestra recuperación.